R
eagan
. S
e trata de una ideología pan-económica y
m
ono
-
cultural al servicio de un grupo
particular
,
que inicia un nuevo proceso de do
m
inación o colonización hege
m
ónica, cada
vez
m
ás intenso
,
a escala global
,
que logra sustituir la soberanía de los
E
stados
-
nación con
las nuevas e
m
presas transnacionales y sus
m
ecanis
m
os financieros
,
e i
m
poner una cultura
global anulando las culturas y la diversidad locales.
D
e hecho
,
este concepto ideológico de globalización es una verdadera guerra a favor del capi-
tal
,
que nos so
m
ete a una nueva dictadura del
m
ercado global
,
dañando las estructuras socia
-
les
,
culturales
,
solidarias e igualitarias de las de
m
ocracias
m
odernas
. E
n este sentido
,
no esta-
m
os viviendo un nuevo orden econó
m
ico universal
,
sino un nuevo desorden econó
m
ico bajo
las leyes in
m
orales del
m
ercado
,
que generan una verdadera guerra econó
m
ica de todos contra
todos
. C
onstituye otra fase del desarrollo histórico del capitalis
m
o en el siste
m
a
m
undial
,
po
-
sible gracias al colapso de los regí
m
enes co
m
unistas y al uso de los nuevos instru
m
entos de
la tecnología global por parte de los propietarios y gestores contemporáneos del capital,
capital a escala
m
undial
,
difuso
,
flexible
,
sin no
m
bre
,
sin raíces nacionales pero cada vez
m
ás
fuerte
,
incontrolable y no regulado por las instituciones y la política
. T
odo esto per
m
ite la expan
-
sión global de las grandes corporaciones transnacionales
,
verdaderas burocracias privadas en
detrimento de las burocracias públicas, estatales, principalmente las de los países débiles y
pobres. Estas empresas transnacionales controlan actualmente más de un tercio de la pro-
ducción industrial
m
undial
. E
llas son las verdaderas protagonistas del capitalismo global
:
su
actividad econó
m
ica y productiva se aleja de cualquier tipo de control político o de
m
ocrá-
tico, político o financiero, de los Estados nacionales; pueden organizar y provocar graves
agresiones contra los derechos humanos en los ámbitos social, económico y ecológico.
L
a actividad política
,
jurídica y econó
m
ica de estas
“
burocracias privadas
”,
justificada por la
santificación del libre
m
ercado
,
constituye una especie de globalización sin de
m
ocracia
,
que
i
m
pone a las decisiones sociales negociadas democráticamente por los Estados modelos de
regulación socioeconó
m
ica como lo
m
ás ventajoso posible para sus intereses particulares
. E
so
significa la existencia de poderes absolutos sin ciudadanos, la burocracia privada no tiene
ciudadanos sino sólo clientes. Esto significa la existencia de un grave déficit democrático
entre los agentes de la globalización
,
las grandes e
m
presas transnacionales
,
el
F
ondo
M
one
-
tario Internacional y la
O
rganización
M
undial del
C
o
m
ercio
,
que están cada vez
m
ás lejos del
control de
m
ocrático de los ciudadanos y
,
sin e
m
bargo
, m
ientras tanto
,
cada vez
m
ás y
m
ás es
capaz de condicionar efectiva
m
ente la opinión pública a través del
m
onopolio de los
m
edios
de co
m
unicación y el control de las redes de infor
m
ación
. E
ste aspecto ideológico de la globa
-
lización tiene consecuencias
m
uy dañinas co
m
o la desigualdad
. A
pesar de sus pro
m
esas de
progreso y desarrollo, el mercado global genera desigualdad económica, empobrecimiento
e injusticia social entre personas y entre países.
P
ara co
m
probar la validez de la teoría marxista debemos investigar si proporciona respues-
ta a preguntas co
m
o
: ¿Por
qué el gran creci
m
iento econó
m
ico conte
m
poráneo y el enor
m
e au
-
mento de la productividad a bajos precios generan, paradójicamente, el empobrecimiento
económico, cultural y social de extensas capas de la población mundial tanto en los países
del
“
norte
”
co
m
o en los del
“
sur
”? ¿P
or qué la interdependencia de las corporaciones trans-
nacionales está destruyendo cada vez más empleos y creando inestabilidad laboral en todo
el
m
undo
? ¿P
or qué la globalización de los
m
ercados productivos y financieros provoca una
degradación social de las de
m
ocracias occidentales
? ¿P
or qué los
m
ecanis
m
os institucionales
de la globalización
(F
ondo
M
onetario
I
nternacional
, B
anco
M
undial y similares) siguen uti-
lizando el engaño de la
“
deuda externa
”
que e
m
pobrece cada vez
m
ás a los países pobres en
el contexto de la corrupción política y económica de las élites gobernantes de esos países?
¿P
or qué los do
m
inadores del siste
m
a ree
m
plazaron la anterior teoría keynesiana de los fallos
del mercado y el papel del Estado en el control económico por la utopía del libre mercado
que perturba cualquier política de redistribución social de las rentas? ¿Por qué se devaluó
el trabajo productivo y sus valores frente a la especulación financiera que genera riqueza
para unas pocas personas y
m
iseria extre
m
a para grandes
m
ultitudes
? ¿P
or qué la globaliza-
ción trae flujos económicos masivos, degeneración cultural, contaminación global, deses-
tabilización, agresión ecológica y daños ecológicos irreversibles, y destruye y rompe la
coexistencia social y el patrimonio común de la humanidad?
¿Acaso la teoría marxista de la lucha de clases como motor histórico no nos permite com-
prender las causas de todos estos males? Nos ayuda a interpretar esta realidad mundial y a
darnos cuenta de que es el consumo excesivo y la concentración masiva de riqueza, pro-
piedades y poder financiero de los países capitalistas del norte y de las clases media y alta
de los países subdesarrollados del sur lo que está causando la creciente empobrecimiento
del Sur mundial, provocando que la brecha de desigualdad en el mundo se duplique en los
últimos treinta años. La tendencia global juega a favor de los privilegiados del Norte y del
Sur, es decir, los grupos socioeconómicos oligárquicos propietarios de capital y los profe-
sionales tecnocráticos altamente calificados. Es obvio que estamos ante una situación típi-
ca de explotación de clase bastante similar a la que existió en etapas anteriores del de-
sarrollo capitalista; no son noticias pertenecientes a la etapa actual del capitalismo global
y del neoliberalismo. La particularidad, la novedad de esta fase consiste en que actual-
mente el modelo de economía global se está consolidando como el único e inevitable mo-
delo posible
,
junto con la ideología del i
m
perio, anulando cualquier resistencia contra la civi
-
lización dominante. Pretende legitimar (justificar) a través de la falta de una alternativa
posible, o sea la fuerza indiscutible de los hechos. La ideología de la globalización neo-li-
beral aparece co
m
o el triunfo del efecto del
m
ercado
,
la utopía del libre
m
ercado, el control
de la tecnología, el monopolio de la información y la comunicación, en definitiva, el
triunfo del capital sobre el
E
stado
,
y todo esto, a una escala global
. E
sto ta
m
bién significa que
la ideología de la globalización priva a la institución política de la ciudadanía de su conte-
nido e
m
ancipador
,
porque la gente
,
ahora
,
a principios del siglo
XXI
cada vez so
m
os
m
enos
ciudadanos
,
es decir
,
tene
m
os
m
enos derechos y
,
por el contrario
,
nos converti
m
os cada vez
m
ás en
“
clientes
”
frente a los proveedores privados del
m
ercado
m
undial que ahora ta
m
bién
nos proporciona servicios en educación
,
salud
,
cultura
,
pensiones
…
por supuesto sólo para los
privilegiados con capacidad de pago de este tipo de consu
m
o global
. A
sí el
m
ercado surge co-
m
o el gran regulador de las sociedades y de los seres hu
m
anos
;
su criterio de inclusión o exclu
-
sión social se centra únicamente en la capacidad de comprar, la capacidad de consumir.
C
uando nos pregunta
m
os si nuestra teoría
m
arxista sigue siendo adecuada para co
m
prender
e interpretar el
m
undo actual
,
pretende
m
os principal
m
ente deter
m
inar si ta
m
bién es útil para
transfor
m
ar esa realidad
m
undial en un sentido progresista hacia el
S
ocialis
m
o y el
C
o
m
unis
-
m
o
. E
ste artículo puede en
m
arcarse entre los
m
ateriales
,
estudios y si
m
ilares encaminados a